La comunidad indígena de San Luis de Morichal, Estado Bolívar, denunció que desde el 2 de febrero han llegado grupos armados y mineros artesanales, con el propósito de invadir sus tierras.
El pasado martes llegaron lanchas a los ríos Cuyuní y Chicanán con integrantes de grupos armados y mineros de El Dorado, con el fin de ejercer minería ilegal en tierras hereditarias de los pemones ubicados en el municipio Sifontes del Estado Bolívar. Indígenas alegan que esta situación ya ha pasado anteriormente y el resultado termina en masacre.
Cada vez más crece la presencia del grupo armado, que a la vez llegan posicionándose en el campamento. Desde hace once años, han ocurrido este tipo de invasiones, lo que provoca secuestros y desapariciones de integrantes de la comunidad, como fue en el caso de Domingo Cabrera que no se sabe nada de él desde el 30 de julio de 2017.
Durante estos once años, la comunidad ha sido víctima de al menos 15 asesinatos; en el 2017 llegaron grupos armados que arremetieron fuertemente en contra de los pemones, con el fin de que abandonen sus tierras. En 2018 el líder indígena de la Gran Sabana, de ese momento, Juvencio Goméz sufrió un «secuestro» junto a la comunidad, donde no podían entrar ni salir del sector en el que se ubicaban. (vía Crónica Uno )
El Parlamento venezolano, en el 2020, declaró como «Oro de sangre» a todo el material aurífero extraído que salga ilegalmente de los Estados Amazonas, Bolívar y Delta Amacuro. Y está prohibida la venta, comercialización, y circulación en el territorio nacional, así como su exportación. Esto se hizo con el fin de alertar a la Comunidad Internacional, sobre los negocios ilícitos realizados en torno a ellos.
Tamara Suju, abogada y defensora de Derechos Humanos, denunció que un grupo de “hombres armados” llegó a la comunidad indígena, “controlar la zona y desplazar a sus pobladores”. En un Tweet Suju escribió: “Me llegan imágenes de la llegada de hombres armados y los llamados sindicatos mineros a la comunidad indígena de San Luis del Morichal, municipio Sifontes. El motivo es controlar la zona y desplazar a sus pobladores para continuar destruyendo nuestra selva”. (vía El Tiempo )
La directora del Laboratorio de Paz, Lexys Rendón, pidió a las Fuerzas Armadas, Ministerio para la Justicia y Paz y a la Región de Defensa Integral, a proteger a esta comunidad indígena, y recordó a través de su cuenta de Twitter que «el altísimo potencial aurífero, la concesión de explotación en zonas aledañas dadas por Maduro, ha afectado gravemente a comunidades indígenas convirtiéndolas por la fuerza y las prebendas en comunidades mineras. San Luis de Morichal ha resistido negándose más que nunca”.
Mientras que los mineros se instalan, los pemones solicitan protección para la comunidad y los capitanes pemones; ya los indígenas denunciaron esta situación a las autoridades militares y civiles del Estado Bolívar.
“Le avisamos al Gobierno porque es su deber garantizar la seguridad de nuestra comunidad. Pero si no obtenemos respuesta, nos tocará seguir resistiendo, así como hemos resistido más de 500 años en nuestras tierras”, sostuvo un nativo de la etnia pemón a periodista deEfecto Cocuyo .
Desde hace días este grupo liderado por «Fabio» intentó invadir el sector pero miembros de la Fuerza Nacional Bolivariana (FANB) indicaron que debían desistir de su misión; sin embargo, buscaron otras rutas que los llevaron al territorio indígena ubicado en el municipio Sifontes. (vía El Pitazo )
Al sector llegó una supuesta comisión de derechos humanos, que lo que han hecho es defender a los mineros. Los habitantes llamaron al ejército para hacer un operativo y exigir el desalojo del grupo pero no han tomado las medidas necesarias, hasta ahora, para que se vayan del lugar. (vía Efecto Cocuyo )
Por Romina Rico