El pasado miércoles 7, el juez de la Corte Suprema de Brasil, Luis Roberto Barroso, ordenó a los representantes de la administración de Nicolás Maduro regularizar su condición de inmigrantes si querían seguir en el país.
Luego de rechazar la petición del diputado Paulo Pimenta en otorgarles una extensión del habeas corpus a los 16 funcionarios que les permitieron quedarse en el territorio brasilero luego de su expulsión en mayo del pasado año, el juez de la Corte Suprema explicó que se debe a la cancelación del carácter diplomático dictado por el presidente Jair Bolsonaro. El mismo reconoce a Juan Guaidó como presidente encargado de Venezuela, según publicó el Centro de Comunicación Nacional. (Vía Diario Las Américas)
La petición de Pimenta se debe a la situación actual del covid-19 y su antecedente se remonta a la decisión tomada por la presidencia de Brasil con base en la salida de los funcionarios de Maduro en 48 horas. No obstante, Barroso suspendió de manera cautelar dicha orden, expresando que no le estaba prestando atención a las razones humanitarias de los diputados y que además, violaban algunos principios establecidos en convenios y tratados internacionales. (Vía El Nacional)
Actualmente, el gobierno de Brasil no reconoce a los representantes de Maduro como miembros oficiales desde septiembre de 2020. Por lo tanto, el tribunal expresó que “Los 16 funcionarios de la Embajada venezolana y sus familiares, si desean permanecer en Brasil, deben regularizar su situación como inmigrantes. Deben seguir las reglas del propio proceso administrativo”. Según continuó, para estos momentos la situación es diferente y a raíz de buscar regularizar la estancia en Brasil de personas extranjeras, deben cumplir con este pedido por desacreditarse su condición de diplomáticos.
De no cumplirse esta orden, los 16 diputados estarán obligados a abandonar el territorio, quien es actualmente uno de los países con la mayor cantidad de contagios y de récord consecutivos de la pandemia en cuanto a fallecimientos. La administración de Bolsonaro resalta por ser uno de los más críticos hacia Maduro y por reconocer a Juan Guaido como presidente interino.
Por otro lado, el presidente brasilero reconoce también a María Teresa Belandria como embajadora legítima de Venezuela en Brasil. A pesar de toda la situación, no se han suspendido las relaciones diplomáticas.
En Venezuela, la situación se torna cada vez más imprecisa a raíz de la cepa brasileña, que en un momento fue llamada como la “variante Bolsonaro” en palabras de la vicepresidenta Delcy Rodríguez.
El país vecino es uno de los destinos más considerados por los venezolanos para emigrar de la crisis política, económica y social. Aproximadamente unos 262.500 viven actualmente en el país y para hacerles la estadía más sencilla, le permitió a los inmigrantes presentar cualquier documento de identidad para solicitar una autorización de residencia en Brasil sin importar su fecha. La misma les permitirá a los habitantes extranjeros trabajar y tener acceso a los diversos servicios públicos. (VíaAnalítica)
Por Andreína Barboza