Vía El Nacional
Con el título de Ley de Solidaridad Sostenible, el gobierno de Colombia liderado por el presidente Iván Duque, ha presentado al Congreso un documento de 110 páginas que en realidad contienen una reforma tributaria que aspira recaudar 6.300 millones de dólares adicionales según declaró el ministro de Hacienda colombiano, Alberto Carrasquilla, “vendrá en un 73% de las personas naturales y el resto, de las empresas”. (vía BBC)
La reacción por parte de la ciudadanía colombiana no se hizo esperar, y las centrales obreras y los sindicatos organizaron un paro nacional, con marchas y protestas, para este miércoles 28 de abril en ciudades como Bogotá, Cali, Barranquilla, Medellín y Bucaramanga, entre otras. Sin embargo, ante la grave situación que se vive en ese país a causa de la tercera ola de la pandemia del covid-19, un tribunal administrativo ordenó posponer dichas protestas. (vía El Universo)
Miles de colombianos, no obstante, hicieron caso omiso a esta orden y en horas de la mañana del día pautado, las calles de las principales ciudades del país se llenaron de manifestantes que exigían al Congreso desaprobar la polémica Ley. En casi todo el país las protestas se desarrollaron de manera pacífica: jóvenes, representantes de organizaciones civiles, sindicatos, entre otros grupos de la sociedad colombiana, marcharon con carteles, música, bailes y vehículos adornados; pero en Cali, Bogotá, Medellín y Neiva los hechos se tornaron violentos. (vía El Universo)
La violencia en Cali se inició muy temprano, cuando e la madrugada un grupo de manifestantes derribó una estatua del conquistador y fundador de la ciudad Sebastián de Belalcázar, ubicada en el barrio La Arboleda. A partir de este hecho, el vandalismo se extendió y la Alcaldía se vio en la necesidad de adelantar el toque de queda (aplicado como medida anti-pandemia) desde la 1 p.m. y extenderlo hasta el próximo domingo a las 5 a.m. Jorge Iván Ospina, alcalde de la ciudad, declaró: “Desafortunadamente en la mañana de hoy mientras que unas grandes mayorías salieron a movilizarse bajo su derecho a la protesta, otras personas de manera premeditada, irresponsable y criminal actuaron para vandalizar la amada Cali”. (vía CNN en español y Panampost)
El saldo de los hechos violentos en toda Colombia fue informado por Daniel Palacios, ministro del Interior: 40 personas detenidas por actos de vandalismo; 44 policías lesionados; 14 buses, 2 vehículos particulares y 3 motocicletas destruidos; 21 unidades del TransMilenio afectadas con grafitis y vidrios rotos, así como 21 estaciones del sistema; 13 instalaciones bancarias y 5 supermercados saqueados. También se conoció que durante los eventos fallecieron dos ciudadanos. (vía Semana y Panampost)
A las declaraciones reprobatorias de los portavoces del gobierno se sumó la de Jaime Alberto Cabal, presidente de la Federación Nacional de Comerciantes, quien afirmó: “Los resultados de esta jornada han sido lamentables. Además de los saqueos y daños al transporte público y a los establecimientos comerciales, han reinado las aglomeraciones y la falta de protocolos de bioseguridad”. (vía Semana)
Por Ángela Solá