Gustavo Marcano, ministro consejero de la Embajada de Venezuela en Washington por parte de la administración de Juan Guaidó, anunció el lunes 28 de diciembre la elaboración de un censo de aquellos venezolanos que necesiten un Estatus de Protección Temporal (TPS por sus siglas en inglés)
Este Estatus de Protección Temporal es un beneficio temporal que otorga el Departamento de Seguridad Nacional de los Estados Unidos (DHS) que permite a personas provenientes de determinados países vivir y trabajar legalmente de forma transitoria. A los países a los que se les otorga este beneficio son aquellos padecen condiciones peligrosas que puede que impidan volver a salvo a sus ciudadanos a su país de origen.
Para que un país pueda ser considerado para el Estatus de Protección Temporal debe cumplir con ciertas características como por ejemplo estar pasando por una guerra civil o algún conflicto armado, desastres naturales como huracanes o terremotos o alguna otra circunstancia extraordinaria que lo amerite.
Este censo se le presentará a las autoridades estadounidenses, ante esto Marcano señaló que «Estamos esperando a que llegue la nueva administración para entregarles un número preciso para poder trabajar con ellos»
Para lograr esto, Marcano señaló que se hará todo lo posible para que el Congreso o la nueva administración que tomará posesión apruebe en el primer mes el TPS para los venezolanos.
También agregó que «lo que los venezolanos necesitan es una garantía para poder vivir libres y trabajar legalmente en este país y no ser deportados a Venezuela.» Todas estas declaraciones las hizo a la salida del Broward Transitional Center, un centro de detención cercano a Miami. En este sitio, él y otros miembros de la delegación diplomática que representa a la administración de Juan Guaidó se reunieron con 40 venezolanos detenidos en ese lugar por razones migratorias; 38 son hombres y 2 son mujeres.
El ministro consejero recalcó que ninguno de los 40 venezolanos que están en Broward Transitional Center han cometido delitos. Son migrantes que huyeron de Venezuela por sufrir de persecuciones o simplemente salieron en búsqueda de mejores condiciones y calidad de vida, tanto para ellos como para sus familias.
Hace aproximadamente un año la cifra de venezolanos en cárceles para migrantes era de 1.100, actualmente de acuerdo con Brian Fincheltub, ministro consejero de la Embajada de Venezuela en Washington, esa cifra disminuyó a 257. Esto se debe al trabajo que realizaron abogados de inmigración probono, es decir, aquellos que trabajan ahí sin honorarios, quienes pudieron ayudar a el 70% de esos venezolanos a resolver en libertad todos sus asuntos migratorios. (vía El Nacional)
Por Ángela Solá