Michelle Bachelet, Alta Comisionada de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, exhortó al gobierno de Colombia a investigar de manera urgente, transparente, imparcial e independiente a los presuntos responsables de las agresiones y muertes durante las protestas que ocurrieron en la ciudad de Cali, independientemente de que los supuestos culpables sean funcionarios del Estado. (vía ABC)
La Alta Comisionada de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos señaló que, hasta la fecha, 54 de los muertos y lesionados que se registraron, como resultado de las protestas, se deben al uso de armas de fuego. “Pido que se ponga fin a todas las formas de violencia, incluyendo el vandalismo, y que todas las partes sigan hablando, para que se garantice el respeto por la vida y la dignidad de todas las personas” comentó Michelle Bachelet. (vía UN News)
A través de un comunicado, Bachelet expresó: “Estos hechos son aún más preocupantes dados los avances que se habían logrado para resolver, a través del diálogo, el malestar social, tras el inicio de un paro nacional contra varias políticas sociales y económicas del gobierno”.
Además, Bachelet reiteró que solo mediante el diálogo pueden ser atendidas las demandas de quienes participan activamente en las manifestaciones, como los que se oponen a las protestas. El representante especial del Secretario General de la ONU en Colombia, Mario Ruiz Massieu, también aprovechó la ocasión para instaurar el diálogo como instrumento para resolver el conflicto. (vía UN News)
El sábado 29 de mayo, el presidente de Colombia, Iván Duque, ordenó el despliegue del Ejército en la ciudad de Cali como una forma de controlar las protestas. Estas protestas son el resultado de la presentación, por parte del gobierno, de un proyecto de reforma fiscal que traería como consecuencia la disminución del umbral de ingresos de los colombianos.
La justificación que ofreció el presidente Iván Duque ante esto fue que consideró esta reforma necesaria para que las políticas de apoyo (que surgen por el impacto económico que tuvo la pandemia de Covid-19 en el país) se pudieran mantener; sin embargo, la mayoría de los colombianos la consideraron excesiva, injusta e inoportuna. (vía BBC Mundo)
Por Ángela Solá